viernes, 18 de agosto de 2023

F.G.L.

18 de agosto. Hoy la muerte recuerda
el temblor indebido de un joven sudoroso, 
hondo y frágil, maniatado, sin rumbo,
marcado por un naipe de venganza inclemente,
truncado injustamente a espaldas de la noche.
No queda rastro alguno del final destrozado 
del sueño irrepetible de un gigante indefenso,
brillante como un niño escondido en un pozo
persiguiendo el hechizo de un reflejo inasible
que siente con la fuerza de la nieve que arde.
Su voz volcó el latido de todos los relojes.
Desató sin saberlo el pulso más invicto.
El odio maldiciente derribó su figura
para que su silencio no incendiara los ojos
con la sed admirable de todo lo visible.
La tierra es un secreto donde cabe su sangre.
Basta leer sus ojos para saberlo quieto
dormido bajo el agua al calor de las huertas.
Nació para dar vida y ese fue su delito.
De volver llegaría desnudo e impecable,
perforada su alma de jazmines ilesos.


Cala Torta, al atardecer, 18.agosto.2023





Take this waltz, por Leonard Cohen https://www.youtube.com/watch?v=jWMOqVKHeSQ 

Pequeño vals vienés, por Silvia Pérez Cruz https://www.youtube.com/watch?v=vx5CW0Vyvi8 


2 comentarios:

Myriam dijo...

Hermosos y sentido homenaje a Federico García Lorca. ¡Qué su recuerdo perdure en nuestros corazones y en su obra!. Un fuerte abrazo.

Carlos Medrano dijo...

Muchas gracias por tu atenta lectura, Myriam. Yo me alegro de haber escrito este inesperado poema (suelen ser los poemas los que nos visitan y nos piden paso y no al revés) al recordar la efemérides de su triste fusilamiento. Ninguna muerte dictada por los hombres es justificable, pero en la de Federico sentimos la crueldad ejercida sobre un ser especial, irrepetible, profundamente creativo, vulnerable, sensible y capaz de desplegar la belleza más audaz e inocente dejándola al alcance de todos para abrir una vida más alta y cercana a la realización y la felicidad. Su obra sigue viva porque nada interrumpe lo sagrado. Y el corazón estaba en sus palabras.