domingo, 12 de abril de 2020

Lenta espera

La vida de otro modo:
inadvertido marzo
detrás de las ventanas.
En el aire lo mismo
un horizonte limpio
que un invisible filo.
¿Quién ha paralizado
la mano, el juego, el beso,
las calles y sus pasos,
ante el viento los rostros?
Todo encerrado en casa
en torno a una respuesta
al igual que una vela
parpadeando el trazo
de la palabra intacta
que tantea un escriba.
Memoria de una rosa:
la luz de cada día 
al entrar en la alcoba 
no está exenta de aromas.
En esta lenta espera
una sombra encendida
resguarda la mañana.
Nos sabrá de otro modo 
bajar de nuevo al mundo.
Todo será valioso,
incluido el recuerdo.
En tu cuarto esta tarde
hasta el suelo resbala
planeando una hoja
e imaginas el vuelo
que enlaza cada nube
sobre las azoteas.
El reloj ahora marca
un tiempo sigiloso.
Atiendes cada huella
allá donde conduzca.
 
 

5 comentarios:

Unknown dijo...

Muy descriptivo, inspirado e inspirador... Heptasílabos....



Jaume Pons dijo...

Memoria de una rosa:
la luz de cada día
al entrar en la alcoba
no está exenta de aromas.

Joder, Carlos. Simbiosis de recuerdos, colores, experiencias, fragancias... se agolpan en tus cuatro versos: nunca la flor había poseído tanta esencia.

Carlos Medrano dijo...

Cuando se escribe, Jaume, se va revelando la realidad y los enfoques que paulatinamente se presienten. Yo te agradezco que resaltes este fragmento que contigo resuena. También me atrae a mí. Y no menos me sucedió con el siguiente:

Nos sabrá de otro modo
bajar de nuevo al mundo.
Todo será valioso,
incluido el recuerdo.

Este recuerdo sin duda me conmueve y es el de aquellos que injustamente murieron anticipadamente por la guadaña de esta desgraciada pandemia sin duda alguna ni casual, ni natural, ni espontánea. Ya descubriremos un día su desquiciada razón o lo que había detrás de ella.

Patricia K dijo...

"En esta lenta espera
una sombra encendida
resguarda la mañana."
Me gustan mucho esos versos. Creo que para muchos de nosotros el tiempo resbala, y no sabemos hacia dónde.
Saludos!

Carlos Medrano dijo...

Confiemos, Patricia, que ese enigma nos conduzca a una presentida y deseada solución. De la misma manera que las cosas encerradas germinan y la semilla contiene la altura a la que aspira.